Si hay un puesto difícil de llenar en las canchas que la Selección recorrió durante toda su historia es el lateral derecho. Ya en 1978, César Menotti ubicó de “4” a un marcador central como Jorge Olguín. El déficit se mantiene y el Mundial de Rusia no será la excepción. Tal vez Javier Zanetti haya sido el último indiscutido.
Eduardo Salvio y Gabriel Mercado, dos jugadores que jamás tuvieron rendimientos excelentes y sostenidos en esa posición -e incluso no se criaron allí- serán los encargados de custodiar ese sector, al menos en la previa.
“La realidad es que me gusta jugar en donde sea. Me adapto a la necesidad del entrenador. Quiero brindarme al máximo, sobre todo estar en la Selección y ante un Mundial. En el puesto que sea, tengo que dar lo mejor”, le dijo Mercado a ESPN luego de participar del entrenamiento a la par de sus compañeros, como hace mucho que no sucedía. Una lesión en la espalda lo tenía relegado.
La declaración parte de que a Jorge Sampaoli no le disgustaría utilizarlo como defensor central junto a Nicolás Otamendi, dejando de lado así a Federico Fazio. Allí es cuando Salvio se quedaría definitivamente con el puesto de marcador de punta derecho.
“Quiero estar contra Israel, Islandia, Croacia... Quiero estar ahí en el partido que sea. Hay que aprovechar cada momento. Si estoy adentro, que sea con línea de cuatro o de tres atrás, ja. El entrenador sabrá qué es lo mejor”, reconoció “Toto” Salvio. El ex jugador de Lanús, jugó de titular ante Haití en La Bombonera y pese a la poca resistencia que opuso el conjunto caribeño, lo hizo bien.
Salvio fue incluido en la lista como mediocampista, en Portugal se destaca como atacante y Sampaoli lo ubicaría de lateral. La famosa polifuncionalidad se valora y mucho en los candidatos a ocupar el lateral derecho, un lugar verdaderamente inhóspito en la Selección.